viernes, 14 de enero de 2011

Herencia

Siempre me he considerado conciente de mi herencia. Pero pocos días me golpea el peso de la misma en la cara como hoy.

Entre las cosas que me faltan para acostumbrarme al D.F. en definitiva están el tener un grupo de amigos, digámosle, extenso, como el que tengo en querétaro para poder armar un plan prácticamente como y cuando se me ocurra. Las ventajas de esto es haber redescubierto una de las personas más maravillosas: Mi abuela.

Digamos que se ha vuelto el principal destino de mis planes sociales, su casa o salidas con ella para hacernos compañía. Que quede claro que no es en ningún sentido una queja, al contrario, estoy muy agradecida de tener la oportunidad tan increíble de convivir con esta fuente casi inacabable de historias, consejos y opiniones.

Alma tímida, sincera y chiapaneca. Sobra decir que aprovecharé este espacio para contarles algunas de las historias que en estos espacios que disfruto tanto.